lunes, 22 de febrero de 2010

Oscuridad con nombre.

Miradas negras con bienvenidas poco anheladas, gestualidad con ausencia de gratitud; cuerpo rígido, algo elegante, con prejuicios: hijos del flagelamiento voluntario: nietos de esa sensación tan concurrida de odiarse a sí mismo al pisar pavimento, luego de haberse amado ante el reflejo acogido por el espejo de su hogar.

Decae ante situaciones en las que su presencia se pueda llegar a ver opacada por terceros y renace orondo, lleno de un jubilo malévolo, luego de haber degradado con palabras y pensamientos a aquellos que hace creer que tienen su confianza... -Pobre humano tan ausente de luz- Lleno de complejos y emociones reprimidas es; vive entre un egoismo que consume y se pierde de los gratos momentos gracias a la escasa participación grata con los ajenos a su "yo"... Siempre tan ensimismado, tan poco cristalino. Oculta su envidia y pinta sus carencias en cada una de las palabras que nacen de su boca en el momento en que estas golpean con una intención deningrante a cualquier humano que esté fuera de su orden frivolo y repugnante.

Amigos son pocos... lo embriaga una felicidad soberbia al decir que desconoce esa palabra, aunque la inexistencia de la misma en su léxico le afecte tanto en su interior. Incontables las máscaras ya utilizadas por este joven tan aborrecible: viene cual cordero, desfilando su amabilidad hipócrita y poco palpable, luego, a los días, semanas, meses o años se retira cual víctima, dejando a cuestas de los demás energías oscuras que interrumpen la circulación de armonía... y es esta, su actitud tan poco descrita, un tanto del producto de vivir respaldado por un sarcasmo inculcado por sus superiores: Ríe de lo que no es, creyendo ser más y sería más, dejando de reír de sus vacíos (...)

Quizás, probablemente... son pocas las palabras que se necesitan para develar a ser humano tan despreciable, pero cuanto tiempo hay que asumir para poder plasmarlas. Sin embargo, aún espero por ese día en el que las máscaras dejen de ser una opción para su rostro, su cuerpo, sus sentimientos... Aunque debo confesar que desafortunadamente seré ausente de tal exposción pues he sido víctima de cansarme del cansancio... Hoy le digo Adiós, no hasta luego.

1 comentario:

dinorah dijo...

... lo urbano retrae y destruye e n mundos.... submundos... me gusta la vista desde ahì... tan cerca sin complicarte y mucho menos involucrarte. se siente palpable y subtraes la causa para corregir el error... siempre el lado oscuro nos conduce a lo màs claro del corazòn... pues siente segura tù alma que su pluma fernanda tiene vuelo de angel. en relaciòn a la ciudad y lo que concierne. puede ser un buen material... sienta de mi parte la confianza del creador y la exquisita pluma nada comùn . gracias . D.LLL